Por qué Ucrania quiere la independencia: una historia de agresiones rusas

Holodomor

El genocidio del Holodomor de 1932-1933 acabó con la vida de millones de ucranianos. Su recuerdo marcó el impulso de Ucrania hacia la independencia y la resistencia al dominio de Moscú.

Chernóbil

El desastre de Chernóbil en 1986 y el encubrimiento de Moscú destruyeron la confianza en el sistema soviético. Pero la agresión de Rusia no terminó ahí.

Guerra por los activos

A la hora de repartir los activos soviéticos, valorados en cientos de miles de millones, se prometió a Ucrania un 16 %. Rusia se quedó con todo.

Traición

Ucrania renunció al tercer arsenal nuclear más grande del mundo a cambio de garantías de seguridad por parte de Estados Unidos, Reino Unido y Rusia. Sin embargo, a pesar de los tratados que prometían respetar las fronteras de Ucrania, Moscú se anexó Crimea en 2014 y hoy libra una guerra a gran escala.

Guerras comerciales

Incluso antes de 2014, Rusia atacó a Ucrania con guerras comerciales: cortó el suministro de gas en 2005 y bloqueó las importaciones en 2013. Moscú utilizó la economía como arma cada vez que Ucrania se acercaba a la independencia o a Europa.

Guerra de propaganda

En 2008, Putin le dijo al presidente Bush: «Ucrania ni siquiera es un país». La propaganda rusa se hizo eco de este mensaje tanto dentro como fuera del país, preparando el escenario para la guerra.

Rusia utilizó no solo la política y los medios de comunicación, sino también el cine, la música y los libros para difundir su narrativa, ridiculizando a los ucranianos como tontos o delincuentes y reprimiendo su cultura. El objetivo era sencillo: borrar la identidad cultural de Ucrania para luego atacarla físicamente.