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Cazas MiG, bombarderos Tu-95, drones Shahed: las fábricas de armamento rusas son atacadas con drones

Al parecer, una oleada de ataques con drones afectó a varias instalaciones de la industria de defensa rusa, entre ellas dos importantes plantas aeronáuticas y varios fabricantes de armas, según informó el 11 de julio Andrii Kovalenko, director del Centro Ucraniano de Lucha contra la Desinformación.
Kovalenko declaró que un ataque tuvo como objetivo la fábrica de aviones de Lukhovitsy, en la región de Moscú, que fabrica y moderniza cazas MiG-29 y MiG-31.

«La planta aeronáutica de Lukhovitsy, en la región de Moscú, fue atacada», informó Kovalenko.
Añadió que la planta también contribuye al desarrollo de aviones de combate de nueva generación, incluido el llamado «caza de primera línea prospectivo» de Rusia, basado en plataformas MiG. Además, se dice que la planta participa en la modernización de drones tipo Shahed, conocidos en Rusia como UAV Geran.
Por otra parte, los restos de un avión no tripulado cayeron en los terrenos de la compañía aeronáutica Beriev en Taganrog, en la región de Rostov, tras lo que, según las autoridades rusas, fue una interceptación de defensa aérea.
«Un vehículo aéreo no tripulado fue neutralizado por un grupo móvil de defensa antiaérea. Sus fragmentos cayeron en el territorio de la compañía aérea G.M. Beriev», escribió la alcaldesa de Taganrog, Svitlana Kambulova.
Dijo que no había víctimas y que los equipos de emergencia estaban trabajando en el lugar. Las autoridades rusas utilizan con frecuencia el término «caída de escombros» incluso cuando las pruebas sugieren ataques directos de drones contra objetivos militares.
La planta de Beriev es una importante instalación aeroespacial especializada en aviones anfibios y sistemas de alerta temprana aerotransportados, incluido el avión radar A-50.


También presta servicios a aviones de la aviación naval y moderniza bombarderos estratégicos como el Tu-95MSM. La empresa depende de la Corporación Unida de Aeronaves de Rusia, que forma parte del conglomerado estatal de defensa Rostec.
Mientras tanto, otros ataques con drones tuvieron como objetivo instalaciones de la industria de defensa en Tula, una ciudad con una densa concentración del complejo militar-industrial de Rusia.

Según Astra y vídeos de testigos presenciales compartidos en Internet, se oyeron explosiones en el distrito Proletarsky de la ciudad, sede de al menos tres importantes empresas de defensa.
Entre estos, se incluyen
KBP Instrument Design Bureau, que desarrolla armas guiadas de precisión;
NPO Splav, fabricante de sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes;
Shcheglovsky Val, fabricante de sistemas de defensa antiaérea, armas de infantería y munición guiada para las fuerzas terrestres rusas.
El gobernador de Tula, Dmitri Milyaev, afirmó que las defensas aéreas rusas habían derribado 13 drones sobre la región, aunque no comentó los posibles daños.
Anteriormente, las imágenes por satélite confirmaron la destrucción de varios helicópteros y un sistema de defensa antiaérea Pantsir-S1 en el aeródromo de Kirovske, en la Crimea ocupada por Rusia, tras un reciente ataque ucraniano con drones.






