Drones atacan la base aérea rusa Engels-2, base de bombarderos estratégicos Tu-95MS y Tu-160

Un ataque a gran escala con drones tuvo como objetivo la base aérea militar rusa Engels-2, en la región de Sarátov, y provocó potentes explosiones y detonaciones secundarias de munición, informó el 20 de marzo el medio ruso ASTRA.

Las explosiones se escucharon en Engels a partir de las 4:00 de la mañana, y un espeso humo negro se elevó sobre el aeródromo.

Las imágenes de satélite y los vídeos geolocalizados indican que el incendio se declaró en un depósito de misiles y artillería. La explosión fue tan intensa que se vieron edificios dañados en zonas civiles cercanas, posiblemente por la explosión de municiones o por los intentos de las defensas aéreas rusas de interceptar los drones.

La base aérea Engels-2 alberga la flota de bombarderos estratégicos de Rusia, incluidos los bombarderos Tu-95MS y Tu-160, que Moscú ha utilizado para lanzar ataques con misiles de largo alcance contra Ucrania.

La instalación está situada a 620 kilómetros de la frontera ucraniana y ha sido blanco de repetidos ataques con aviones no tripulados desde el comienzo de la invasión rusa a gran escala.

Según el gobernador de la región de Saratov, las autoridades locales evacuaron a los residentes de las zonas cercanas a la base aérea tras el ataque. Las explosiones fueron tan potentes que, al parecer, se oyeron en Saratov, ciudad situada justo al otro lado del río Volga, frente a Engels.

Debido al incidente, se suspendieron temporalmente los vuelos en los aeropuertos de Saratov y Samara, según confirmó la agencia de aviación rusa Rosaviatsiya.

El Ministerio de Defensa ruso afirmó que 54 drones ucranianos fueron derribados sobre la región de Saratov, mientras que un total de 132 drones apuntaron a Rusia y a Crimea ocupada durante la noche.

No es la primera vez que Engels es blanco de ataques. Anteriormente, aviones no tripulados ucranianos atacaron el depósito de petróleo «Kristall» de Rosrezerv en la ciudad.

Anteriormente, un ataque con drones alcanzó las instalaciones de transferencia de petróleo «Kavkazskaya», en la región rusa de Krasnodar, provocando un gran incendio que siguió ardiendo durante horas. El fuego se propagó más tarde y cubrió 3.750 metros cuadrados.