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La defensa antiaérea británica fracasa en la prueba de resistencia contra un ataque con misiles de tipo ruso

Simulaciones militares británicas han revelado que las defensas aéreas del Reino Unido habrían tenido dificultades para repeler un ataque ruso con misiles a gran escala, similar al lanzado contra Ucrania al inicio de la invasión a gran escala en febrero de 2022.
Según informó The Times el 26 de abril, la Royal Air Force (RAF) llevó a cabo el simulacro en 2022 utilizando el sistema Gladiator, un entorno virtual altamente clasificado y realista empleado por las fuerzas armadas británicas y estadounidenses.
El ejercicio reprodujo la escala y el tipo de ataques con misiles que Rusia utilizó el primer día de su invasión de Ucrania, pero redirigidos contra territorio británico.
Durante el simulacro, varios misiles atravesaron con éxito las defensas británicas. El comodoro del aire Blythe Crawford, que dirigió el Centro de Guerra Aérea y Espacial de la RAF hasta la semana pasada, declaró que, antes del ejercicio, los militares británicos habían considerado que el territorio nacional era seguro.
Subrayó que el simulacro ponía de relieve la necesidad de replantearse las antiguas suposiciones sobre la seguridad interior.
«Durante décadas, creímos que el resto de Europa serviría de amortiguador entre nosotros y las amenazas potenciales. La mayoría de las operaciones militares se llevaban a cabo en el extranjero, y suponíamos que nuestras bases en casa estaban a salvo», dijo Crawford. «La simulación demostró que ahora la base en casa también está amenazada».
A raíz de los resultados, el ejército británico puso en marcha medidas para mejorar su capacidad de recuperación, como el refuerzo de los refugios de los aviones y la práctica de aterrizajes de cazas sobre hielo en Finlandia para prepararse para condiciones de pista no estándar.
El simulacro Gladiator de la RAF indicó que el volumen y la complejidad de un asalto moderno con misiles y drones -combinando varios tipos de misiles lanzados desde múltiples direcciones, junto con enjambres de drones- supondría un desafío para cualquier sistema de defensa aérea.
Crawford señaló que las lecciones extraídas de Ucrania han cambiado radicalmente la concepción de la superioridad aérea. «El control del aire está ahora localizado, cambiando de trinchera en trinchera, en lugar de en todo un teatro de operaciones», dijo, añadiendo que los ejércitos occidentales deben adaptarse a las nuevas realidades en las que la ventaja puede ser temporal y muy disputada.
Desde la simulación original, las capacidades de la OTAN se han mejorado, y ahora se cree que un número significativo de misiles sería interceptado en caso de ataque real. Sin embargo, los expertos insisten en que es necesario realizar más esfuerzos, sobre todo para dispersar más rápidamente los activos críticos por todo el país durante una crisis.
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Los informes indican que la infraestructura de defensa del Reino Unido ha sufrido importantes recortes en las últimas décadas, incluido el cierre de varias bases aéreas y el abandono de refugios reforzados. Se espera que una próxima revisión estratégica de la defensa aborde estas vulnerabilidades.
En la actualidad, la defensa contra misiles balísticos del Reino Unido depende en gran medida de su flota de seis destructores Tipo 45. En enero de 2024, el Ministerio de Defensa anunció un programa de actualización de los sistemas de defensa antiaérea de los buques, que incluye mejoras del sistema de misiles Sea Viper, que se ha utilizado con éxito para interceptar misiles balísticos y aviones no tripulados en despliegues operativos.
Un portavoz del Ministerio de Defensa declaró: «El Reino Unido está plenamente preparado para defenderse de cualquier amenaza junto con nuestros aliados de la OTAN. Nuestras fuerzas están equipadas con una serie de capacidades avanzadas para garantizar un enfoque estratificado de la defensa aérea y antimisiles.»
Al mismo tiempo, los analistas de defensa advierten de que la evolución de las tácticas rusas—incluido el uso de drones de largo alcance como las variantes Shahed, que pueden lanzarse desde buques con la ayuda de cohetes propulsores- debe tenerse en cuenta en la planificación futura.






