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Qué son los «drones durmientes» rusos y por qué suponen una amenaza creciente para Ucrania

La guerra de Rusia en Ucrania ha entrado en una nueva fase de guerra de drones. Utilizando líneas de fibra óptica para el control, Moscú está desplegando ahora drones FPV que pueden ocultarse durante horas o días antes de lanzar ataques repentinos. Este artículo analiza cómo funcionan estos «drones durmientes», por qué son difíciles de detener y qué retos plantean a las defensas ucranianas.
Rusia está desplegando cada vez más drones de visión en primera persona (FPV) guiados por cables de fibra óptica en los frentes de Ucrania. Entre sus aplicaciones más notables se encuentra una táctica conocida como emboscada con «drones durmientes», en la que los drones permanecen inactivos cerca de objetivos clave y se activan en el momento óptimo.
¿Qué es un dron durmiente?
Los drones durmientes son drones FPV modificados para funcionar en modo de espera de baja potencia durante periodos prolongados. Una vez desplegado en un lugar estratégico, como un tejado, una colina o una carretera, el dron se apaga y permanece electrónicamente silencioso y físicamente inactivo. Entonces puede activarse a distancia para lanzar un ataque de precisión sin previo aviso.
Según Focus, los desarrolladores rusos han integrado en sus drones un módulo «Gibernator» que les permite entrar en modo de hibernación durante varias semanas.

Estos drones no emiten señales de radiofrecuencia mientras están inactivos, lo que los hace extremadamente difíciles de detectar con las herramientas convencionales de guerra electrónica.
A diferencia de los drones FPV tradicionales, estos dispositivos utilizan un cable de fibra óptica para mantener el control. Este sistema basado en cables evita las emisiones de radiofrecuencia, lo que hace que los drones sean indetectables para la mayoría de los sistemas de guerra electrónica.
Cómo Rusia implementa las tácticas del dron durmiente
Las fuerzas rusas han integrado drones durmientes en su doctrina de combate desde 2024. Según Dmitry Kuzyakin, jefe del Centro de Soluciones Integradas no Tripuladas de Rusia, los drones durmientes pueden permanecer en espera hasta un mes en verano y alrededor de una semana en condiciones invernales.
Los drones se someten a pruebas de resistencia a la lluvia y la nieve rociándolos con chorros de agua a alta presión antes de su uso sobre el terreno.
Cuando aparece un objetivo, el operador envía una señal de activación a través del cable de fibra óptica y el dron se lanza en cuestión de segundos. Esto elimina el retraso que supone el lanzamiento desde un lugar distante y da a los objetivos un tiempo mínimo para reaccionar.

Los informes confirman avistamientos de drones modificados con un rudimentario tren de aterrizaje que les permite posarse en tejados o terrenos irregulares sin dañar sus componentes. A menudo se colocan en puntos elevados para maximizar la visibilidad y la eficacia de los ataques.
Para evitar su captura, estos drones están equipados con mecanismos de autodestrucción. Según el medio estatal ruso RIA, los drones llevan un circuito «detonador» que se activa si se detecta una manipulación, como cortar el cable de fibra o abrir la carcasa del dron. Kuzyakin afirmó que esta característica ha garantizado que «ni uno solo de nuestros drones haya caído en manos enemigas».
Ventajas clave
El dron durmiente ofrece varias ventajas en el campo de batalla:
Sigilo: El control por fibra óptica elimina las emisiones de radiofrecuencia, lo que permite a los drones permanecer ocultos.
Sorpresa: Los drones atacan desde posiciones cercanas, dejando poco tiempo al enemigo para responder.
Eficacia energética: Los drones conectados a tierra consumen la mínima energía mientras esperan.
Resistencia a interferencias: Los enlaces de fibra óptica son inmunes a las interferencias electrónicas.
Persistencia: Según TS2.tech, el anclaje de fibra permite que los drones permanezcan listos para la acción durante largos periodos de tiempo con sólo un chorrito de energía para mantenerlos preparados.
Esta táctica permite que los drones funcionen de forma similar a las minas terrestres o a las municiones de merodeo, pero con el control del operador y una sincronización precisa.
Limitaciones y la respuesta ucraniana
A pesar de sus ventajas, la táctica tiene limitaciones. El alcance del dron está limitado por el cable de fibra (normalmente 5-10 km, hasta un máximo de 15-20 km). Las características del terreno, como bosques o edificios, pueden enganchar el cable y provocar su desconexión.
En algunos casos, los drones se han perdido durante su colocación debido a obstáculos medioambientales. Según RFE/RL, los drones de fibra óptica han tenido problemas en la vegetación densa, donde el cable puede enredarse.
Las fuerzas ucranianas se están adaptando mejorando los métodos de detección visual y desplegando contramedidas físicas como redes de drones y fuego directo.
Cortar el cable de fibra es una opción teórica, pero puede desencadenar la detonación. Las tropas ucranianas también están experimentando con métodos para detectar el destello de las líneas de fibra a la luz del sol, que puede delatar la ubicación de un dron durmiente.
Tendencias operativas y uso futuro
Los pequeños sistemas no tripulados pueden desempeñar ahora funciones de centinela o emboscada con un coste mínimo y un gran impacto. Mientras ambos bandos siguen innovando, la presencia de drones ocultos e inactivos añade una nueva capa de complejidad a la guerra moderna.
Según RFE/RL, Rusia comenzó a aumentar la producción de estos drones a finales de 2024, mientras que Ucrania está trabajando en sus propias variantes guiadas por fibra. Fuentes militares ucranianas informan de pruebas activas de modelos de emboscada similares a principios de 2025.

En el futuro, la detección y neutralización de drones durmientes puede llegar a ser tan rutinaria como la retirada de minas. Estos drones representan amenazas persistentes a lo largo de las rutas de suministro y cerca de activos de gran valor. El campo de batalla está cada vez más saturado de dispositivos de bajo coste y alta letalidad capaces de ejecutar ataques de precisión desde posiciones ocultas.
Los drones durmientes representan una convergencia de innovación de bajo coste, paciencia táctica y resistencia a la guerra electrónica, lo que supone un avance significativo en la guerra con drones.






