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Al parecer, se han encontrado componentes del cohete chino de 107 mm tipo 63 tras la explosión en el 51º Arsenal GRAU ruso
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Ivan Khomenko]( "Photo of Ivan Khomenko")
Tras la explosión en el 51º arsenal ruso GRAU el 22 de abril, se grabaron y compartieron en Internet fragmentos de munición esparcidos por el lugar. Entre los restos, varios fotogramas de vídeo parecían mostrar componentes parecidos a cohetes no guiados de 107 mm.
Según Defense Express el 23 de abril, aunque la identificación visual por sí sola no puede aportar pruebas concluyentes, las secciones de la cola captadas en las imágenes -especialmente la ausencia de los estabilizadores típicos de las municiones de fabricación soviética- sugieren que se trata de cohetes importados.
Algunas fuentes se han referido a las municiones como cohetes Fadjr-1 iraníes. Sin embargo, según los analistas, el diseño y las características de estas municiones se ajustan más al sistema de cohetes de lanzamiento múltiple (MLRS) chino Tipo 63, que ha proliferado ampliamente por Asia y África desde su desarrollo en la década de 1960.
El Tipo 63 original se basaba en el sistema soviético BM-14, con el calibre reducido de 140 mm a 107 mm. El sistema cuenta con 12 tubos lanzadores y ha servido de base para diversas variantes localizadas, como el Tipo 75 de Corea del Norte y el Fadjr-1 de Irán.
En muchos casos, estos cohetes también han sido desplegados desde plataformas improvisadas de lanzamiento único por actores no estatales como Hamás y Hezbolá.
Los cohetes compatibles con el sistema Tipo 63 tienen un alcance efectivo de hasta 8 km, y los modelos más recientes lo amplían a 11 km. Cada cohete suele pesar entre 18 y 19 kg, de los cuales unos 8 kg corresponden a la ojiva.
Aunque hasta ahora no se había observado que las fuerzas rusas utilizaran cohetes de 107 mm en combate, el descubrimiento de estas municiones en un almacén de la GRAU sugiere que Rusia podría haberlas obtenido a través de canales no revelados. El origen exacto sigue sin estar claro, pero los observadores militares consideran tanto a Irán como a Corea del Norte proveedores plausibles.
Anteriormente, el 17 de abril, el Presidente Volodymyr Zelenskyy declaró que la inteligencia ucraniana había obtenido pruebas que sugerían que China está suministrando pólvora y artillería a Rusia, y que entidades chinas podrían estar implicadas en la producción de armas en territorio ruso. Dijo que pronto se darían a conocer más detalles.
