Explosiones dejan fuera de servicio una importante subestación eléctrica en Donetsk, interrumpiendo el suministro eléctrico a 500.000 personas en la región ocupada.

Una serie de explosiones ocurridas durante la noche afectaron una importante subestación eléctrica entre las ciudades de Donetsk y Makiivka, ocupadas por Rusia, sumiendo a gran parte de la región en la oscuridad y dejando sin electricidad a unos 500.000 residentes, según informaron las autoridades locales de ocupación el 17 de noviembre.

Según Denis Pushilin, jefe de la autoproclamada "República Popular de Donetsk", impuesto por Moscú, el ataque interrumpió el suministro eléctrico a más de 500.000 consumidores en Donetsk, Makiivka, Horlivka y Yasynuvata.

“Los equipos de emergencia trabajan para restablecer el suministro eléctrico”, escribió Pushilin, añadiendo que por la mañana se había restablecido parcialmente la electricidad en varias zonas.

Imágenes publicadas por el grupo ucraniano de monitoreo Exilenova+ muestran grandes explosiones en la subestación de Chaikyne, seguidas de apagones generalizados en varios distritos de la ciudad y sus alrededores.

La subestación es un nodo de 330/220/110/35 kV que funciona como un punto de conexión de alta tensión entre la central térmica de Starobesheve y ZuGRES-2 a la red de distribución local.

Alberga grandes transformadores, equipos de conmutación y sistemas de protección automatizados, lo que la convierte en una pieza clave de la red energética regional que da soporte a la logística militar rusa en el este de Ucrania.

Donetsk sigue siendo un centro logístico y de mando fundamental para las fuerzas de ocupación rusas. El medio militar ucraniano Militarnyi afirma que la inhabilitación de Chaikyne complicará las comunicaciones rusas sobre el terreno, dificultará las operaciones de las bases de reparación y los puestos de mando, y obligará a las fuerzas de Moscú a destinar recursos adicionales a restablecer o redirigir el suministro eléctrico.

Anteriormente, las transmisiones de una de las estaciones de radio militares más enigmáticas de Rusia, UVB-76, más conocida por los oyentes de onda corta como “el zumbador”, se interrumpieron temporalmente después de que un supuesto ataque con drones dejara fuera de servicio una subestación eléctrica cercana.

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