“Fusilados por desobedecer órdenes”: Comandantes rusos ejecutan a sus propias tropas por lucro y control

Un artículo publicado por el medio independiente ruso Verstka denuncia que comandantes de varias unidades rusas en el frente ucraniano están llevando a cabo ejecuciones sumarias de sus propios soldados o forzándolos a realizar asaltos suicidas si se niegan a cumplir órdenes, una práctica que las propias tropas denominan «obnulenie» («anulación») y «ejecución por ataque», según un informe del 28 de octubre.

La investigación de Verstka recopila testimonios de soldados y familiares, así como denuncias presentadas ante la Fiscalía Militar Principal de Rusia; describe casos en los que hombres que se negaron a participar en asaltos fueron fusilados a quemarropa en sus propias trincheras o enviados al frente sin armadura ni armas bajo la amenaza de destacamentos de bloqueo.

“Desde el inicio mismo de la invasión a gran escala prevista para 2025, las ejecuciones y la tortura se han vuelto más sofisticadas”, escriben los periodistas, citando a tropas que afirman que los comandantes “se deshacen” de los hombres no deseados ordenando “asaltos de carne” de los que pocos sobreviven.

“Allí nunca sabes quién te va a disparar: los tuyos o los ucranianos”, declaró un militar.

Entre las acusaciones específicas del informe se incluye la de un comandante que tenía a “una persona especialmente entrenada para la ‘anulación’”, descrita por un soldado movilizado llamado Aleksei: durante los asaltos, este subordinado tenía la orden de “levantar a diez hombres y enviarlos al frente”, y si alguno se negaba al ver las condiciones, “le disparaba a quemarropa con un fusil automático”, tras lo cual los cuerpos eran arrojados al río Siverskyi Donets o enterrados en las cercanías, según informa el medio.

En otro caso de junio de 2025, un soldado que se negó a servir de señuelo —un cebo para atraer el fuego ucraniano— fue golpeado y grabado en vídeo, y posteriormente ejecutado por orden de un comandante, según dos de sus compañeros. Verstka también cita relatos de francotiradores asignados para matar a soldados en retirada y de drones utilizados para rematar a los heridos o castigar a los infractores.

Los servicios de inteligencia ucranianos y los medios independientes han difundido repetidamente llamadas interceptadas e informes de campo que describen el resurgimiento de las "tropas de bloqueo", unidades que impiden la retirada con fuerza letal.

En junio de 2025, el Kyiv Post informó sobre una interceptación en la que soldados rusos hablaban de reclutadores que "venían a nosotros" para alistar hombres para las unidades de bloqueo—una táctica propia de la Segunda Guerra Mundial—y uno de los participantes respondió que dichos reclutadores eran "unos auténticos canallas" a quienes "habría que fusilar de inmediato".

El medio danés Dagens destacó las conclusiones de Verstka, que informan que los soldados rusos que se niegan a realizar "ataques de sacrificio" corren el riesgo de ser fusilados o "ejecutados en un ataque", lo que coincide con la terminología y los casos descritos en la investigación rusa.

Si bien el Kremlin ha desestimado previamente estos informes y no se ha pronunciado sobre las nuevas acusaciones, Verstka afirma haber identificado a más de 100 presuntos "anuladores", la mayoría comandantes, y cita más de 12.000 denuncias ante la fiscalía militar relacionadas con represalias contra militares rusos desde 2022.

Anteriormente se informó que imágenes de drones e informes militares ucranianos mostraban a soldados rusos matando a sus propios heridos en el campo de batalla, incluyendo ejecuciones por disparos o golpes.

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