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Hungría desafía la presión de EE. UU. y seguirá importando petróleo ruso
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Hungría seguirá importando crudo ruso a pesar del llamamiento de Washington a los aliados de la OTAN para que dejen de comprarlo, declaró el ministro de Relaciones Exteriores, Péter Szijjártó, al margen de la Asamblea General de la ONU en Nueva York el 23 de septiembre.
«No podemos garantizar el suministro seguro [de productos energéticos] para nuestro país sin las fuentes de petróleo o gas rusas», declaró al diario The Guardian, y añadió que «solo podemos comprar donde tenemos infraestructura».
Los medios regionales se hicieron eco de la postura de Szijjártó el 23 de septiembre, citando sus palabras de que Hungría no abandonaría la energía rusa porque hacerlo pondría en peligro la seguridad del suministro. «No podemos garantizar el suministro seguro... sin el petróleo o el gas rusos», afirmaron algunos citando sus palabras.
Las declaraciones de Szijjártó se produjeron tras la reciente exigencia del presidente Donald Trump de que Europa dejara de comprar petróleo ruso como condición para las nuevas sanciones de Estados Unidos a Moscú.
«Estoy dispuesto a imponer sanciones importantes a Rusia cuando todos los países de la OTAN hayan acordado y comenzado a hacer lo mismo, y cuando todos los países de la OTAN DEJEN DE COMPRAR PETRÓLEO A RUSIA», escribió Trump en Truth Social la semana pasada, según la reseña de su publicación realizada por The Guardian.
Budapest sigue siendo uno de los principales reductos del bloque debido a su dependencia del suministro por oleoducto a través de la red Druzhba, de la era soviética, que también abastece a Eslovaquia.
Las restricciones de la UE ya han eliminado la mayor parte de las importaciones de crudo ruso por vía marítima, pero Hungría y Eslovaquia siguen recibiendo petróleo por oleoducto en virtud de exenciones anteriores; según informes recientes, las importaciones de petróleo ruso de la UE han caído alrededor de un 90 % desde 2022.
Las interrupciones en el suministro de gas en agosto pusieron de manifiesto esta dependencia. Tras los ataques que dañaron las infraestructuras en Rusia, se interrumpió temporalmente el suministro a Hungría y Eslovaquia, antes de que se reanudaran parcialmente las entregas en modo de prueba con volúmenes más bajos, según informó Hungría en ese momento.
La presión europea y transatlántica va en aumento. Bloomberg ha informado de que la UE está sopesando medidas comerciales dirigidas a los flujos restantes de Druzhba, posiblemente sin el consentimiento unánime, mientras que comentaristas y funcionarios de toda Europa han instado a Budapest y Bratislava a sumarse a los esfuerzos generales para reducir los ingresos energéticos de Rusia.
Anteriormente, se informó de que Eslovaquia y Hungría habían restablecido el suministro de petróleo ruso a través del oleoducto Druzhba tras un cierre temporal causado por un ataque ucraniano contra una estación de bombeo en Rusia.
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