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La UE planea prohibir totalmente las importaciones de gas ruso en 2027
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Dariia Mykhailenko]( "Photo of Dariia Mykhailenko")
La Unión Europea está preparando un amplio plan para poner fin a todas las importaciones de gas ruso a finales de 2027, avanzando en sus esfuerzos por romper su dependencia histórica de los combustibles fósiles de Moscú.
Según fuentes familiarizadas con el asunto, Bruselas propondrá en junio una prohibición de todos los nuevos contratos de compra de gas con Rusia, incluidos los acuerdos al contado, que siguen representando alrededor de un tercio de las importaciones de gas ruso en el bloque. La medida entraría en vigor a finales de este año, según informó Bloomberg el 5 de mayo.
La UE también trabaja en la eliminación progresiva del suministro de gas ruso a través de gasoductos y contratos de GNL a largo plazo. Estas restricciones se aplicarían durante un periodo de transición más largo, que terminaría en 2027.
La iniciativa llega tras el retraso en la publicación de la «hoja de ruta» energética de la UE a principios de año, ya que el bloque sopesó las implicaciones geopolíticas de los esfuerzos diplomáticos liderados por Estados Unidos para poner fin a la guerra de Rusia contra Ucrania.
Aunque los flujos de gas ruso a Europa han caído bruscamente desde la invasión a gran escala de 2022, Moscú sigue siendo un proveedor notable a través de Turquía y de los envíos de gas natural licuado.
Se espera que las medidas propuestas abran la puerta a un aumento de las exportaciones estadounidenses de GNL a Europa, un pivote energético previamente defendido por el presidente estadounidense Donald Trump.
A pesar de las preocupaciones persistentes sobre los costos de la energía y la seguridad del suministro, los funcionarios de la UE creen que el impacto en los precios será mínimo, ya que se espera que una nueva ola de suministro mundial de GNL ingrese al mercado en los próximos años.
Anteriormente, una amplia mayoría bipartidista en el Senado de Estados Unidos apoyó un proyecto de ley que aplicaría nuevas y duras sanciones a Rusia e impondría fuertes aranceles a los países que sigan comprando su petróleo y gas, a menos que Vladimir Putin acceda a negociaciones significativas para poner fin a la guerra en Ucrania.
