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Las armas nucleares tácticas de EE.UU. volverían al Reino Unido por primera vez desde 2008
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Ivan Khomenko]( "Photo of Ivan Khomenko")
Según se informa, Estados Unidos ha vuelto a desplegar armas nucleares tácticas en el Reino Unido por primera vez en más de 15 años, lo que supone un posible cambio en la postura nuclear de la OTAN en Europa.
Se cree que las armas son bombas termonucleares de gravedad B61-12, transferidas a RAF Lakenheath en Suffolk, Inglaterra.
Las bombas fueron transportadas por vía aérea desde el Centro de Armas Nucleares de la Fuerza Aérea de EE.UU. en la Base Aérea de Kirtland, en Nuevo México, y entregadas en un almacén de seguridad de nueva construcción en las instalaciones del Reino Unido, según informó el 21 de julio el UK Defence Journal.
Aunque el Departamento de Defensa estadounidense no ha confirmado oficialmente el traslado, y el Ministerio de Defensa británico no hace comentarios sobre despliegues nucleares, múltiples fuentes han indicado la llegada de las armas.
La B61-12 es una bomba nuclear táctica modernizada con un rendimiento variable y capacidad de guiado de precisión. Es compatible con varias plataformas de lanzamiento, incluido el F-35A Lightning II. La RAF Lakenheath, sede de los escuadrones de combate 493 y 495 del Ala de Caza 48, opera el F-35A y fue una de las primeras bases europeas en hacerlo.
La última vez que la RAF Lakenheath albergó armas nucleares estadounidenses fue durante la Guerra Fría, y se informó de su retirada definitiva en 2008, en el marco de los esfuerzos más amplios de desarme en toda Europa.
El regreso de las capacidades nucleares a la base se produce después de las mejoras de infraestructura señaladas por primera vez en los documentos presupuestarios estadounidenses de 2022, que hacían referencia a proyectos de construcción alineados con los requisitos de la misión nuclear.
Funcionarios de los gobiernos de EE.UU. y el Reino Unido no han hecho comentarios sobre el redespliegue.
Anteriormente, Margarita Simonyan, figura mediática alineada con el Kremlin, advirtió de que los planes de Estados Unidos de suministrar misiles de largo alcance a Ucrania podrían obligar a Rusia a lanzar un «ultimátum nuclear», afirmando que no era posible otro resultado.
Su declaración, de la que se hicieron eco los medios de comunicación estatales y los blogueros partidarios de la guerra, siguió a los informes de que el presidente Trump podría aprobar pronto armas capaces de alcanzar territorio ruso.
