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Polonia quintuplicará su producción nacional de munición ante la creciente preocupación por la seguridad de la OTAN

Polonia está aumentando la producción nacional de municiones en respuesta a la guerra de Rusia contra Ucrania y a las crecientes preocupaciones por la seguridad en el flanco oriental de la OTAN.
Según el ministro de Bienes del Estado, Jakub Jaworowski, el país quintuplicará la producción de obuses de gran calibre en los próximos tres años.
En una entrevista con el Financial Times, publicada el 30 de junio, Jaworski declaró que el conglomerado estatal de defensa PGZ recibirá alrededor de 663 millones de dólares de financiación gubernamental para ampliar la producción de proyectiles de artillería de 155 mm—críticos para los obuses estándar de la OTAN—y cartuchos para tanques de 120 mm.
Jaworski declaró que la guerra de Rusia1 en Ucrania demostró que “la munición de 155 mm desempeña un papel clave en el campo de batalla moderno y se necesita en grandes cantidades”.
"Nuestro objetivo a corto plazo es aumentar significativamente la producción nacional de este tipo de armamento, así como independizarnos de los suministros extranjeros y construir una base sostenible para la autonomía nacional. Esta es una de nuestras prioridades", añadió.

En la actualidad, PGZ produce unos 30.000 proyectiles de gran calibre al año. El objetivo de la nueva inversión es aumentar esa cifra hasta 150.000-180.000 unidades anuales, con toda la producción dentro de Polonia para evitar la dependencia de componentes importados.
Según Jaworowski, Grupa Azoty, la mayor empresa química de Polonia, también se ha dirigido al gobierno solicitando financiación para ampliar sus operaciones en el sector de la munición mediante la producción de componentes clave como cargas propulsoras y nitrocelulosa para explosivos.
Anteriormente, se informó de que Polonia se enfrentaba a interrupciones generalizadas de la señal GPS sobre el mar Báltico, que las autoridades han atribuido a la actividad hostil de la Federación Rusa.
El ministro polaco de Defensa Nacional, Władysław Kosiniak-Kamysz, confirmó que las interferencias no son aisladas. Los aliados de la OTAN en la región del Báltico y el norte de Europa también han informado de perturbaciones similares.






