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Rusia aumenta sus exportaciones de petróleo en 200 000 barriles diarios tras los ataques ucranianos que han interrumpido el funcionamiento de las refinerías
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Dariia Mykhailenko]( "Photo of Dariia Mykhailenko")
Rusia ha aumentado su plan de exportación de crudo desde los puertos occidentales en 200 000 barriles diarios en agosto, revisando la cifra a alrededor de 2 millones de barriles diarios. El ajuste se produce después de que una ola de ataques con drones ucranianos obligara a cerrar varias refinerías, lo que liberó crudo para su envío, según informó Reuters el 26 de agosto, citando fuentes del sector.
La planificación de las exportaciones sigue siendo incierta, debido a los continuos ataques y a los cambios en los calendarios de reparación. «Los ataques continúan y los plazos de reparación cambian a diario. No está claro cuánto podrá cargar Rusia este mes o el próximo», afirmó una fuente.
Según Reuters, normalmente, los vendedores rusos reciben los planes de carga completos al menos una semana antes del comienzo del mes, pero el calendario de septiembre aún no se ha concretado.
Los ataques ya han inutilizado al menos 10 refinerías este mes, cerrando instalaciones que representan el 17 % de la capacidad de procesamiento de Rusia, alrededor de 1,1 millones de barriles diarios. Ucrania también atacó el oleoducto Druzhba y la estación de bombeo de Unecha, en la región de Briansk, una ruta fundamental para el suministro de crudo al puerto de Ust-Luga. Según una estimación, los daños causados allí podrían reducir las exportaciones en hasta 500 000 barriles diarios.
Actualmente, Ust-Luga está operando a la mitad de su capacidad de 700 000 barriles diarios, y los volúmenes se desvían a Novorossiisk y Primorsk, según informó Reuters. Sin embargo, la escasez de buques a finales de agosto está limitando aún más la capacidad de Moscú para aumentar los envíos.
Las interrupciones se producen en un momento en que Rusia lucha por aumentar sus ingresos bajo las sanciones occidentales y la presión de Estados Unidos sobre los principales compradores para que reduzcan las importaciones de petróleo ruso. Si bien las cargas de los puertos occidentales dependen en gran medida de la producción de las refinerías nacionales, las exportaciones hacia el este no se ven afectadas en gran medida.
Anteriormente, un ataque con drones ucranianos interrumpió gravemente las operaciones de dos de las mayores refinerías de petróleo de Rusia.
El ataque afectó a las instalaciones propiedad de la gigante petrolera estatal Rosneft. La Compañía de Refinación de Petróleo de Riazán, la mayor refinería de Rosneft, se vio obligada a reducir su producción en aproximadamente un 50 %, mientras que la refinería de Novokuibyshevsk, una importante planta del grupo Samara, fue cerrada por completo.
