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Usyk Defeats Dubois by Knockout, Becomes Undisputed Heavyweight Champion for Second Time

Oleksandr Usyk se impuso por nocaut en el quinto asalto a Daniel Dubois el 20 de julio de 2025, en el estadio londinense de Wembley.
La victoria permitió a Usyk retener sus títulos de peso pesado de la AMB (Super), la OMB y el CMB y recuperar el cinturón vacante de la FIB, convirtiéndose en el campeón indiscutible de peso pesado por segunda vez en su carrera.
El combate encabezó un evento con entradas agotadas y supuso el segundo enfrentamiento entre ambos púgiles. Su primer combate, en 2023, terminó en el noveno asalto, con polémica por un golpe al cuerpo que se consideró bajo.
USYK KNOCKS OUT DUBOIS IN THE 5TH!!! WOWWWW #UsykDubois2 pic.twitter.com/audVPG5NeL
— Championship Rounds (@ChampRDS) July 19, 2025
En los primeros asaltos, ambos púgiles intercambiaron jabs y combinaciones. Usyk asestó izquierdazos limpios en los últimos segundos del primer asalto. En el segundo asalto, Dubois conectó un puñetazo recto, pero Usyk respondió con una serie al cuerpo y terminó el asalto con un fuerte izquierdazo a la cabeza.
En el tercer asalto, Dubois asestó varios golpes certeros antes de que Usyk recuperara el control con múltiples combinaciones. El cuarto asalto fue más comedido, con ambos púgiles esperando las oportunidades.
En el quinto asalto, Usyk derribó a Dubois con una ráfaga de golpes a la cabeza. Después de que Dubois se pusiera en pie, Usyk le asestó una segunda combinación a la cabeza y al cuerpo, que resultó en nocaut. El árbitro detuvo el combate después de que Dubois no respondiera a la cuenta.
Usyk sigue invicto con un récord profesional de 24-0, 14 de ellos por KO. Dubois tiene ahora un récord de 22-3, con 21 nocauts.
Usyk es el primer boxeador de la era de los cuatro cinturones que logra el estatus de campeón indiscutible tanto en la división de peso crucero como en la de peso pesado.
Anteriormente, el 21 y 22 de diciembre de 2024, Oleksandr Usyk derrotó a Tyson Fury por decisión unánime en una histórica revancha en el Kingdom Arena de Riad (Arabia Saudí).
Los tres jueces puntuaron el combate 116-112 a favor de Usyk, lo que le convirtió en el primer campeón indiscutible de los pesos pesados de la era de los cuatro cinturones. El combate siguió a la victoria inicial de Usyk sobre Fury a principios de ese año, consolidando su dominio en las dos categorías de peso.






