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Europa solo tiene unos años para prepararse para una invasión rusa, advierte el ministro sueco
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Europa tiene poco tiempo para prepararse ante una posible agresión rusa, según ha declarado el ministro de Defensa sueco, Pål Jonson. Mientras Rusia sigue «atascada» en Ucrania, la OTAN debe reforzar urgentemente su flanco noreste, declaró Jonson al diario The Telegraph el 9 de septiembre.
«El ejército ruso ha aprendido mucho de su guerra en Ucrania, incluido el uso de drones, y su economía está ahora preparada para la guerra», afirmó.
«Las fuerzas curtidas en batalla y una industria armamentística en pie de guerra podrían permitir a Vladimir Putin lanzar una invasión limitada de la región nórdica y báltica en un plazo de dos a cinco años», añadió Jonson.
Dada la disposición de Putin a asumir riesgos políticos y militares, la amenaza podría extenderse finalmente a toda Europa, y no solo a los Estados fronterizos con Rusia, continuó.
El director del Servicio Checo de Seguridad e Inteligencia, Michal Koudelka, se hizo eco de la advertencia, citando los ataques de Rusia contra civiles ucranianos.
«Debemos estar absolutamente seguros de que los rusos actuarían de la misma manera contra nosotros», declaró a Politico.
Añadió que las fuerzas ucranianas están ganando un tiempo crucial para que Europa se prepare ante una posible agresión rusa. Jonson también había destacado la importancia de aprovechar esta oportunidad para reforzar las defensas septentrionales de la OTAN.
El ejército ruso sigue desarrollando sus capacidades en materia de guerra electrónica, ataques de largo alcance y operaciones con drones, al tiempo que aumenta constantemente la producción de armas. Rusia también ha ampliado su presencia militar a lo largo de las fronteras de Finlandia y los países bálticos, construyendo nuevas bases, reparando y tendiendo vías férreas y militarizando Kaliningrado, afirmó Jonson.
En respuesta, los miembros del noreste de la OTAN lanzaron la misión Baltic Sentry en enero de 2025 para patrullar el mar Báltico y proteger las infraestructuras críticas.
La operación ayudó a las autoridades finlandesas a capturar el petrolero ruso Eagle S, cuya tripulación supuestamente cortó un cable submarino en el golfo de Finlandia y transportaba equipo de espionaje, según informó The Moscow Times.
Sin embargo, The Telegraph informa de que la escasez de fondos podría obligar a reducir la misión, sustituyendo los buques patrulleros por drones marítimos.
Mantener la operación es vital, ya que supone un claro elemento disuasorio para Rusia y protege las infraestructuras submarinas esenciales para las redes de Internet y eléctricas de Europa, según Charlie Edwards, asesor principal del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos.
Anteriormente, Suecia había acusado a Rusia de estar detrás del fuerte aumento de las interferencias en el GPS sobre el mar Báltico, advirtiendo que dichas interferencias suponen un riesgo cada vez mayor para la seguridad de la aviación comercial.
