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La élite de la escuadra aérea rusa en Crimea ha perdido 7 de sus 12 aviones Su-30.
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Vlad Litnarovych]( "Photo of Vlad Litnarovych")
El 43.º Regimiento de Aviación de Ataque Naval de Rusia ha perdido más de la mitad de sus aviones de combate Su-30SM desde el inicio de la guerra a gran escala en Ucrania, según informó el medio de comunicación ucraniano especializado en defensa Militarnyi el 15 de agosto.
La última pérdida se produjo ayer, cuando otro Su-30SM polivalente se estrelló, lo que supuso un nuevo golpe para una de las unidades aéreas más importantes del Kremlin en el mar Negro.
El regimiento, unidad militar n.º 59882, tiene su base en el aeródromo «Saki» confiscado en Novofedorivka, Crimea, desde la ocupación de la península por Moscú en 2014. Además de los Su-30SM, la unidad también opera hasta un escuadrón de bombarderos Su-24.
El editor jefe de Military Aviation, Denys Tomenchuk, declaró a Militarnyi que el regimiento desplegó un escuadrón completo —12 aviones Su-30SM— al inicio de la invasión rusa de 2022.
La primera pérdida de un Su-30SM se produjo el 5 de marzo de 2022, sobre la región de Mykolaiv. Ambos pilotos se eyectaron y fueron capturados: el mayor Oleksiy Holovensky, entonces comandante del escuadrón, y el capitán Aleksei Kozlov, el navegante.
El regimiento sufrió otro duro golpe el 9 de agosto de 2022, cuando las fuerzas de defensa de Ucrania atacaron la base aérea de Saki, destruyendo tres Su-30SM y dañando otro, además de cinco Su-24 destruidos y tres dañados.
El 11 de septiembre de 2024, las fuerzas especiales ucranianas derribaron otro Su-30SM con un sistema portátil de defensa aérea.
Luego, el 2 de mayo de 2025, en una primicia histórica, la inteligencia militar y el SBU de Ucrania, utilizando un dron naval armado con un misil AIM-9, derribaron un Su-30SM sobre el mar Negro.
El derribo de ayer supone la séptima pérdida confirmada de un Su-30SM para el regimiento.
Además, otros dos de sus aviones han resultado dañados: uno durante el ataque de agosto de 2022 y otro el 1 de julio de 2025, cuando un dron UJ-26 Bober de largo alcance impactó en la base de Saki.
Anteriormente, Rusia amplió el uso operativo de sus aviones de combate furtivos Su-57 Felon en Ucrania, con informes que indicaban misiones más frecuentes y funciones más amplias para los aviones.
