Rusia lanza uno de sus ataques nocturnos más letales contra Ucrania en semanas, matando a seis personas, incluidos dos niños

Ucrania sufrió uno de los ataques nocturnos más intensos de Rusia en las últimas semanas. Misiles y drones impactaron varias ciudades e infraestructuras energéticas en todo el país, causando la muerte de al menos seis personas, incluidos dos niños, y decenas de heridos, según el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania (SES) el 22 de octubre.

Kyiv fue alcanzada por una descarga combinada de drones y misiles que provocó incendios y explosiones en varios distritos.

Cuatro personas murieron en la capital y 18 resultaron heridas, entre ellas cuatro niños. Se produjeron incendios en los distritos de Pecherskyi y Desnianskyi, donde viviendas y gasolineras sufrieron graves daños.

En la aldea de Pohreby, cerca de Brovary, los escombros de un ataque ruso incendiaron viviendas, matando a una mujer de 36 años, a su bebé de seis meses y a una niña de 12 años.

«El estado terrorista mató a una joven nacida en 1987, a un bebé de seis meses y a una niña de 12 años», declaró Mykola Kalashnyk, jefe de la Administración Regional de Kyiv.

Las autoridades también confirmaron la muerte de un hombre de 37 años en el distrito de Brovary tras ser alcanzado por la caída de escombros.

En total, los equipos de rescate reportaron múltiples incendios en zonas residenciales, incluyendo uno en Brovary que envolvió un camión y un remolque. Una mujer de 83 años fue rescatada de una casa en llamas en estado de shock, pero sobrevivió.

En Zaporizhzhia, al menos 13 personas resultaron heridas y más de 2000 residentes se quedaron sin electricidad tras los ataques.

La región de Dnipropetrovsk reportó daños en la infraestructura y el derribo de 42 drones.

En la región de Odesa, los ataques impactaron en Izmail, dañando el puerto y las instalaciones energéticas.

También se registraron ataques en la región de Poltava, donde la infraestructura de petróleo y gas sufrió daños.

El presidente Volodymyr Zelenskyy condenó los ataques, diciendo que demostraban una vez más que "Rusia no siente suficiente presión para prolongar la guerra". Dijo que las fuerzas de defensa aérea trabajaron "toda la noche y hasta la mañana" defendiendo las ciudades bajo fuego.

“Ciudades comunes han sido atacadas, principalmente nuestra infraestructura energética, pero también muchos edificios residenciales”, declaró Zelenskyy. “Desafortunadamente, seis personas murieron, entre ellas dos niños”.

Instó a los socios internacionales a aumentar las sanciones y acelerar el suministro de armas. “Las palabras rusas sobre diplomacia no significan nada mientras los líderes rusos no perciban problemas críticos. Esto solo se puede garantizar mediante sanciones, capacidades de largo alcance y diplomacia coordinada”, afirmó, instando a la Unión Europea, Estados Unidos y el G7 a actuar con decisión.

El ministro de Asuntos Exteriores, Andrii Sybiha, también denunció los ataques de Moscú como "ataques brutales contra Ucrania" e instó a Occidente a proporcionar apoyo energético de emergencia antes del invierno.

"En lugar de diplomacia y negociaciones de paz, Rusia continúa con sus brutales ataques", escribió. "Necesitamos recursos energéticos adicionales, equipos de reparación y capacidad de defensa aérea. Esto es urgente".

Sybiha afirmó que los ataques demostraban que "Rusia aún no siente suficiente presión para obligarla a poner fin a la guerra", y añadió: "Es hora de dejar atrás las ilusiones y demostrar fuerza".

Anteriormente, un ataque con aviones no tripulados rusos tuvo como objetivo una zona civil en la ciudad de Sumy, en el noreste de Ucrania, hiriendo al menos a 12 personas y causando daños importantes a vehículos y edificios residenciales.

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