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Según se informa, Trump está dispuesto a ofrecer a Putin acceso a los recursos de Alaska y alivio de las sanciones

Según The Telegraph del 13 de agosto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se está preparando para ofrecer al líder ruso Vladimir Putin una serie de incentivos económicos para poner fin a la guerra en curso en Ucrania.
Estas propuestas se presentarán durante su esperada reunión del viernes, que tendrá lugar en La oferta de Trump a Putin incluye el acceso a los ricos recursos naturales de Alaska, el levantamiento de algunas sanciones a la industria aeronáutica rusa y el acceso a los minerales de tierras raras en los territorios ucranianos actualmente ocupados por las fuerzas rusas.
The Telegraph informa de que Scott Bessent, secretario del Tesoro de Estados Unidos, está informando a Trump sobre estas compensaciones económicas como parte de los esfuerzos para acelerar un acuerdo de alto el fuego.
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«Hay una serie de incentivos, entre los que podría encontrarse un posible acuerdo sobre minerales y tierras raras», declaró al diario The Telegraph una fuente con conocimiento de las propuestas. Este acuerdo otorgaría a Putin acceso a valiosos minerales en las regiones orientales de Ucrania, en particular al litio, que se utiliza en la producción de baterías.
Se cree que Ucrania posee el 10 % de las reservas mundiales de litio, dos tercios de las cuales se encuentran en zonas bajo control ruso.
Trump también discutió el levantamiento de las sanciones a las aerolíneas rusas, una medida que podría beneficiar a fabricantes estadounidenses como Boeing. Las aerolíneas rusas, que actualmente operan una flota de más de 700 aviones, podrían volver a recurrir a los proveedores estadounidenses para el mantenimiento y las piezas críticas. Esto se produce tras los recientes incidentes, como el accidente de un Antonov An-24 de la era soviética y un ciberataque que dejó en tierra varios vuelos de Aeroflot.
Además de las propuestas sobre minerales y aviación, Trump está considerando abrir los valiosos recursos naturales de Alaska, especialmente las reservas de petróleo y gas, a Rusia. La proximidad de Alaska a Rusia —a solo tres millas a través del estrecho de Bering— hace que esta sea una opción atractiva para los intereses estratégicos de Putin en la región ártica, que representó el 80 % de la producción de gas de Rusia en 2022.

Sin embargo, fuentes del Gobierno británico subrayaron a The Telegraph que, aunque estos incentivos pueden ser aceptables para Europa, los términos de cualquier acuerdo deben evitar recompensar a Rusia por su invasión de Ucrania.
«La sensación es que debe presentarse de manera que se ajuste a la opinión pública al respecto; no puede verse como una recompensa para Putin», afirmó una fuente.
En una entrevista con Bloomberg, el secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, enfatizó que el presidente Donald Trump está comprometido con poner fin a la guerra en Ucrania, pero está decidido a hacerlo «no a cualquier precio».
«Creo que todo el mundo está frustrado con Putin», dijo Bessent. «Esperábamos que se sentara a la mesa de negociaciones de una manera más sincera. Parece que podría estar dispuesto a negociar, y hemos impuesto aranceles secundarios a los indios por comprar petróleo ruso. Y creo que, si las cosas no salen bien, las sanciones o los aranceles secundarios podrían aumentar».
Bessent señaló que la capacidad de Trump para crear influencia es clave para las próximas conversaciones, y que dejará claro a Putin que «todas las opciones están sobre la mesa».
«No voy a adelantarme al presidente, pero él es el mejor creando influencia para sí mismo, y dejará claro a Putin que todas las opciones están sobre la mesa», añadió Bessent.
El secretario del Tesoro también criticó a los aliados europeos por no hacer lo suficiente para aplicar las sanciones secundarias. «Los europeos están al margen criticando cómo debería hacerlo, qué debería hacer, pero los europeos deben unirse a nosotros en estas sanciones», dijo Bessent.
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Hizo un llamado a los países europeos para que igualaran los esfuerzos de Estados Unidos en presionar a Rusia, recordando una reunión del G7 en la que desafió a los líderes europeos sobre su compromiso con las sanciones secundarias.
«Estuve en la reunión del G7 en Canadá con el presidente Trump, y los europeos no dejaban de hablar del proyecto de ley del senador Graham para imponer aranceles secundarios. Miré a todos los líderes sentados alrededor de la mesa y les pregunté: ¿Están todos los presentes dispuestos a imponer un arancel secundario del 200 % a China? ¿Y saben qué? Todos querían ver qué tipo de zapatos llevaban puestos».
Bessent concluyó: «Es hora de actuar o callarse. El presidente está creando su propia influencia. Necesitamos que los europeos se sumen y ayuden a crear más influencia».
Antes de la cumbre, Estados Unidos ha levantado temporalmente ciertas restricciones a las transacciones financieras relacionadas con los preparativos de la cumbre. Esta flexibilización temporal, que permanecerá en vigor hasta el 20 de agosto de 2025, solo abarca medidas directamente relacionadas con la cumbre y no implica el desbloqueo de activos rusos ni la eliminación de sanciones.
Anteriormente, el presidente estadounidense Donald Trump afirmó que hay «muchas posibilidades» de que se reúna con el líder ruso Vladimir Putin por segunda vez tras la cumbre prevista para el viernes en Anchorage, Alaska.






