TNT en latas: la seguridad polaca descubre un sabotaje ruso utilizando productos enlatados

Los servicios de seguridad polacos han descubierto una posible operación de inteligencia militar rusa que implicaba preparativos para atentados terroristas con drones y explosivos camuflados como latas de maíz. Polskie Radio 24 informó del caso el 2 de octubre, citando a Gazeta Wyborcza, que a su vez se refería a las conclusiones de la Fiscalía Nacional y la Agencia de Seguridad Interna (ABW).

Según los investigadores, en el verano de 2024, un ciudadano ucraniano de 27 años, Vladyslav D., que vivía en Katowice, viajó tres veces de Polonia a Lituania mientras realizaba tareas que le asignaba a través de Telegram un usuario con el apodo de «Warrior». La inteligencia polaca cree que este alias se refiere a la sede del GRU ruso.

Durante una misión, desenterró «latas de maíz» escondidas en un cementerio de Kaunas y, siguiendo órdenes, transportó dos de ellas a Polonia, ocultándolas cerca de la autopista A2. Más tarde, la contrainteligencia lituana descubrió el alijo y determinó que las latas contenían explosivos compactos. Los expertos estimaron la potencia de cada lata en el equivalente a 1.4 kilogramos de TNT.

En Polonia, sin embargo, las latas ocultas desaparecieron. «No sabemos exactamente qué había en las latas desaparecidas. No podemos afirmar con certeza que también contuvieran explosivos, aunque esa conclusión parece obvia», declaró una fuente de la ABW a Gazeta Wyborcza.

Los investigadores también determinaron que esta no fue la única operación. En otro caso, Vladyslav D. entregó paquetes a Alexander S., un saboteador lituano vinculado al GRU. Esos paquetes se enviaron posteriormente a través de empresas de mensajería en Vilna. Tres envíos se incendiaron durante el transporte: en un camión cerca de Varsovia, en el aeropuerto de Leipzig y en un almacén en Birmingham. Un cuarto fue interceptado por la policía polaca.

Aunque no se registraron víctimas, las autoridades advirtieron de que se había evitado por poco una catástrofe. Los envíos transportados por vía aérea se consideraban especialmente peligrosos, ya que una explosión a bordo podría haber provocado un accidente aéreo.

Vladyslav D. fue finalmente detenido en un departamento en Katowice que compartía con su pareja. «Su reclutamiento es un ejemplo clásico de los métodos del GRU. Los rusos buscan personas de los antiguos estados soviéticos con antecedentes penales o dificultades económicas», afirmaron los agentes de la ABW.

Al comentar sobre la amenaza más amplia, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, advirtió: «No se trata solo de ataques híbridos, sino de una guerra híbrida que se está librando en Europa. Creo que debemos centrarnos en los ciberataques y los riesgos de sabotaje».

Durante la cumbre de la Comunidad Política Europea celebrada en Copenhague el 2 de octubre, destacó que los únicos verdaderos expertos en la lucha contra los drones rusos son los ucranianos, y añadió que Europa había subestimado la magnitud de la amenaza procedente de Moscú.

Anteriormente, se informó de que Rusia había lanzado una nueva campaña de propaganda en toda Europa bajo el lema «Rusia no es mi enemigo». En Rumanía, Francia e Italia han aparecido carteles y pegatinas con este mensaje, en un intento de presentar a Moscú como un pacificador en lugar de un agresor.

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