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Video muestra al último gigante militar ruso An-22 desintegrándose en el aire

Unas imágenes recién surgidas muestran el catastrófico accidente de un avión de transporte militar ruso An-22 “Antei”, que se desintegró en el aire antes de estrellarse contra el suelo cerca del embalse de Uvod en la región rusa de Ivanovo, según un nuevo vídeo compartido por la comunidad OSINT Supernova+ el 15 de diciembre.
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Las imágenes capturan el momento en que el enorme avión pierde rápidamente altitud y luego se desintegra en vuelo, dividiéndose en dos secciones antes del impacto.
El accidente ocurrió el 9 de diciembre. Según Militarnyi, los siete miembros de la tripulación a bordo murieron.
SURVIVORS?? Examining the tape from the An-22 CRASH, it is possible at least 2 Russian crew members (load masters) likely attempted to parachute from the plane.
— Chuck Pfarrer | Indications & Warnings | (@ChuckPfarrer) December 14, 2025
Both appear to have suffered malfunctions. On the right, one became totally entangled in his ‘chute… pic.twitter.com/yr7wnHP81S
Medios rusos informan que el avión estaba realizando un vuelo de prueba rutinario tras las reparaciones. Los aviones de transporte An-22 tienen su base en el aeródromo militar de Ivanovo-Severny, un centro clave para la aviación de transporte militar rusa.
Fuentes citadas por el periódico ruso Kommersant, citando a funcionarios del Ministerio de Defensa ruso, afirmaron que el avión llevaba más de 50 años en servicio y estaba en vuelo tras las tareas de mantenimiento programadas.
✈️Moment of the crash of the Russian military transport aircraft An-22 https://t.co/TnvYdBNXB9 pic.twitter.com/7u5xoRh2wx
— Special Kherson Cat 🐈🇺🇦 (@bayraktar_1love) December 14, 2025
Según dichas fuentes, el avión destruido era el último An-22 operativo en servicio en el ejército ruso.
El An-22 “Antei” es un avión de transporte militar pesado de diseño soviético, desarrollado en Kyiv en la década de 1960. Su primer vuelo tuvo lugar el 27 de febrero de 1965, comenzando su producción en serie al año siguiente y su servicio operativo en 1969.
En el momento de su introducción, el An-22 era el avión turbohélice más grande del mundo.

El avión puede transportar hasta 80 toneladas de carga y tiene un peso máximo de despegue de unas 250 toneladas. Está propulsado por cuatro motores turbohélice NK-12MA, cada uno de los cuales produce aproximadamente 15.000 caballos de fuerza.
Según Militarnyi, el An-22 desempeñó un papel fundamental en la evolución de las capacidades de transporte aéreo pesado soviético, allanando el camino para aviones aún más grandes, como el An-124 Ruslan y el An-225 Mriya.
Anteriormente, se produjo un incidente en un regimiento de aviación de bombarderos ruso cuando se activó el sistema de eyección a bordo de un avión estacionado dentro de su refugio.
Según se informa, el mal funcionamiento provocó una eyección mientras el avión estaba en tierra y estático, lo que provocó la muerte tanto del piloto como del navegante, quienes sufrieron lesiones descritas como "incompatibles con la vida".
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