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El 41º Ejército ruso en colapso: La mitad de los muertos o desaparecidos, miles de huidos, según documentos filtrados
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Vlad Litnarovych]( "Photo of Vlad Litnarovych")
El 41º Ejército de Armas Combinadas de Rusia ha sufrido pérdidas catastróficas en Ucrania, con la mitad de sus tropas muertas o desaparecidas y la otra mitad desertando o procesadas penalmente, según documentos internos filtrados al proyecto ucraniano Quiero Vivir el 17 de julio.
El proyecto Quiero Vivir está dirigido por la Dirección de Inteligencia de Defensa de Ucrania y proporciona una línea directa para los soldados rusos que deseen rendirse. El programa garantiza un trato humano conforme a los Convenios de Ginebra y una entrega segura a las fuerzas ucranianas.
Los documentos, supuestamente proporcionados por ciudadanos rusos preocupados, describen pérdidas masivas de personal a partir del 1 de junio de 2025, incluyendo:
8.625 muertos confirmados;
10.491 desaparecidos en combate;
7.846 desertores clasificados como «ausencias no autorizadas».
«Estos documentos exponen la verdadera magnitud de las pérdidas rusas en Ucrania», declaró la iniciativa Quiero Vivir.
El 41º Ejército se compone de las brigadas de fusiles motorizados 35ª, 74ª, 55ª y 137ª, reclutadas principalmente en las regiones de Kemerovo, Tyumen, Novosibirsk y Sverdlovsk, así como en las repúblicas de Jakasia, Tuva y Altai Krai.
La mayoría de las unidades han librado combates sin tregua y han sufrido bajas devastadoras cerca de la ciudad de Pokrovsk, en el este de Ucrania.
La Brigada 74 de la región de Kemerovo ha sido la más afectada, con 2.479 soldados muertos confirmados, 2.732 desaparecidos y 2.789 en la lista de desertores. Sobre la base de los niveles de dotación anteriores a la guerra, de unos 3.500 soldados por brigada, la 74ª ha perdido de hecho dos rotaciones completas de personal.
Una suerte similar ha corrido la 35ª Brigada de Altai Krai, que ha declarado 1.975 muertos, 3.163 desaparecidos y 2.229 desertores.
Aún más crudos son los datos de la 55ª Brigada de Tuva, que originalmente contaba con una fuerza de tan solo 1.600 soldados en 2016. Hasta junio de 2025, ha perdido 1.430 muertos y 1.467 desaparecidos, y otros 1.616 soldados tuvanos han desertado en lugar de seguir luchando a miles de kilómetros de casa.
La 137ª Brigada ha informado de al menos 1.158 muertos, 2.319 desaparecidos y 948 desertores.
Una de las mayores revelaciones tiene que ver con el gran número de deserciones recientes. El 31 de mayo, 42 soldados huyeron de sus unidades. En una semana desertaron 175 soldados, aproximadamente la mitad de un batallón.
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De estos desertores, el 28% eran convictos reclutados en las llamadas «compañías V», unidades de asalto compuestas en su mayoría por prisioneros a los que se prometió la liberación anticipada a cambio de servicio en combate. Ese porcentaje supera con creces la media del 5-30% de ex convictos en las unidades regulares rusas de primera línea.
«Estos hombres están siendo utilizados como tropas de asalto prescindibles», señala el informe. «Cuando encuentran una oportunidad de escapar, la aprovechan. Y muchos nunca son recapturados».
Se calcula que unos 2.228 desertores convictos sólo del 41º Ejército andan sueltos por las zonas de retaguardia de Rusia.
El informe también subraya que las «compañías V» están desplegadas únicamente en unidades de fusiles de motor, no en formaciones de artillería, misiles o ingeniería, lo que subraya aún más su uso como carne de cañón humana.
Anteriormente, al margen de la cumbre de la OTAN del 24 de junio, un alto funcionario de la OTAN declaró que Rusia probablemente ha superado el umbral del millón de bajas totales en su guerra contra Ucrania, incluidos aproximadamente 250.000 muertos.
Según un corresponsal de UNITED24 Media, el funcionario subrayó que el número de bajas rusas sigue siendo «muy, muy alto», a pesar del reciente cambio táctico hacia grupos de asalto más pequeños y móviles.
