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Rusia sacrifica un millón de soldados para desgastar las defensas ucranianas, según los servicios de inteligencia británicos
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Ivan Khomenko]( "Photo of Ivan Khomenko")
La estrategia rusa en el campo de batalla se centra en desgastar las defensas ucranianas mediante implacables asaltos masivos, en lugar de asegurar rápidos avances estratégicos, según la inteligencia de defensa británica.
Este enfoque, basado en la presión sostenida y la ventaja numérica, está diseñado para explotar las vulnerabilidades locales y hacer retroceder gradualmente a las fuerzas ucranianas.
A pesar de haber sufrido aproximadamente un millón de bajas desde el inicio de la invasión a gran escala en febrero de 2022, incluidos unos 250.000 soldados muertos o presuntamente muertos, Moscú sigue dando prioridad a las tácticas de desgaste.
Los informes de inteligencia sugieren que hasta 500.000 de estas pérdidas son irreversibles, e incluyen muertos, desaparecidos y heridos graves.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido señala que el objetivo de Rusia no es la obtención rápida de ganancias territoriales, sino la erosión gradual de las posiciones ucranianas mediante una presión constante.
Esto se ha traducido en más de 200.000 bajas rusas ya en 2025, con pérdidas diarias que actualmente superan los 1.250 efectivos, según el Estado Mayor ucraniano.
La consecuencia de este enfoque de alta intensidad es un sistema médico militar ruso gravemente sobrecargado, que se esfuerza por manejar el volumen de personal herido.
La persistente escasez de personal médico y los cuellos de botella logísticos complican aún más la situación.
Sin embargo, los servicios de inteligencia británicos estiman que los dirigentes rusos están preparados para absorber estas pérdidas siempre que no provoquen una disensión generalizada o una resistencia de las élites.
Mientras haya reemplazos disponibles, Moscú parece decidido a avanzar mediante el desgaste de la mano de obra más que mediante la superioridad tecnológica o la guerra de maniobras.
Anteriormente, analistas independientes de Oryx confirmaron que Rusia ha perdido más de 4.000 carros de combate en Ucrania, basándose en pruebas fotográficas y de vídeo verificadas. El total incluye vehículos destruidos, abandonados y capturados, aunque es probable que la cifra real sea mayor. Desde 2022, Oryx ha documentado visualmente más de 21.500 piezas de equipo militar ruso perdidas en la guerra.
