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Cómo un país sin armada derrotó a la mayor flota del Mar Negro y recuperó sus exportaciones

Febrero de 2024 fue un mes récord para las exportaciones marítimas ucranianas desde el comienzo de la invasión a gran escala: cerca de 8 millones de toneladas de carga se enviaron a través de sus puertos. Pero, ¿cómo ha ocurrido? Analizamos el Corredor Marítimo Ucraniano y cómo surgió.
Ucrania, uno de los cinco mayores exportadores de grano del mundo, posee aproximadamente el 10% del mercado mundial. Gran parte de este grano se destina a Oriente Medio y África, a menudo a través de programas de seguridad alimentaria de la ONU. El transporte marítimo, concretamente a través del Mar Negro en el sur de Ucrania, es el principal y más rentable método de exportación.
La guerra a gran escala en Ucrania, que comenzó en febrero de 2022, paralizó esta ruta de exportación crucial. Más de una docena de puertos dejaron de operar, y la Flota rusa del Mar Negro bloqueó efectivamente la región, impidiendo incluso el paso de carga civil. Los sistemas logísticos de décadas de antigüedad se paralizaron.

De repente, el grano y los productos agrícolas carecían de una forma de llegar a los mercados. Los ferrocarriles, los camiones y la ayuda de los países vecinos intervinieron para facilitar las exportaciones. Sin embargo, esto planteó nuevos retos, como las limitaciones de las infraestructuras, la escasez de transporte y el aumento de los costes.
Los exportadores ucranianos tuvieron que adaptarse para sobrevivir, buscando ingresos y necesitando retirar las cosechas viejas para dejar espacio a las nuevas. La situación supuso un duro golpe económico para Ucrania, ya que los productos agrícolas son su principal producto de exportación. En 2021, estas exportaciones generaron 27.700 millones de dólares en ingresos, lo que supone un tercio de las exportaciones totales del país.
El «corredor de cereales» era un salvavidas para Ucrania. A iniciativa de Ucrania, la ONU y Turquía, Rusia accedió a no atacar a los buques de carga civiles que transportaban productos agrícolas. Este acuerdo permitió a Ucrania reanudar las exportaciones de grano y otros productos agrícolas, esenciales para la economía del país.
Lamentablemente, este salvavidas no era suficiente para las necesidades de Ucrania. Ucrania exportaba unos 44 millones de toneladas de grano al año antes de la guerra, pero el acuerdo limitaba las exportaciones mensuales a tan solo 1-2 millones de toneladas. Rusia saboteó intencionadamente el proceso, sabiendo que agotaría los recursos de Ucrania. En julio de 2023, Rusia se retiró por completo del acuerdo, prohibiendo de hecho las exportaciones seguras.
El problema va más allá del grano. El bloqueo también paralizó la exportación de metales, minerales y productos químicos, aproximadamente la mitad de la economía de exportación de Ucrania antes de la guerra.
Ucrania necesitaba desesperadamente un acceso marítimo total para sus exportaciones rentables, libre de interferencias rusas. En el verano de 2023, tras muchos esfuerzos, se consiguió.
El éxito de las operaciones militares en el mar, combinado con la cooperación internacional, hizo retroceder a la flota rusa. Los resultados son innegables:
Febrero de 2024 marcó un récord para las exportaciones marítimas ucranianas desde la invasión: aproximadamente 8 millones de toneladas de carga transportada. Compárese con el "corredor de cereales", que sólo movió 17 millones de toneladas de productos agrícolas en casi seis meses.
Los funcionarios ucranianos son optimistas respecto a la continuidad de esta tendencia. De ser así, Ucrania podría acercarse a los 100 millones de toneladas de exportaciones marítimas en 2024. Aunque todavía por debajo de los niveles anteriores a la guerra (159 millones de toneladas en 2020, 153 millones de toneladas en 2021), esto sería un logro notable dada la guerra en curso.
Parte 1: Alejar a la flota rusa del Mar Negro de los puertos de la Gran Odesa y del Danubio
El principal reto de Ucrania para restablecer las exportaciones era el control ruso del Mar Negro. Al carecer de una marina propia potente, Ucrania tuvo que encontrar formas innovadoras de proteger su costa y contrarrestar al enemigo.
Neptunos y arpones
Ucrania había desarrollado sus propios misiles antibuque "Neptuno", utilizados por primera vez en 2022 para hundir el crucero ruso "Moskva", un buque insignia de la Flota del Mar Negro valorado en 750 millones de dólares, lo que debilitó considerablemente el dominio naval ruso.

En la primavera de 2022, Ucrania recibió misiles antibuque Harpoon y sistemas de lanzamiento de Dinamarca, Gran Bretaña y los Países Bajos. Esta ayuda, combinada con los misiles ucranianos, hizo más segura una gran franja de costa, protegiéndola principalmente de posibles desembarcos rusos. Hoy, esta zona más segura permite el paso de buques de carga civiles.
Drones navales ucranianos
El desarrollo de drones navales fue otro punto de inflexión para Ucrania. En octubre de 2022, se utilizaron por primera vez drones navales para atacar buques rusos en Sebastopol, dañando la fragata "Almirante Makarov" y el dragaminas "Iván Golubets"
Incapaz de construir, comprar o recibir rápidamente una flota tradicional durante la guerra, Ucrania se centró en desarrollar y producir rápidamente drones navales para luchar contra Rusia.

Esta estrategia tuvo éxito. Durante el año y medio siguiente, Ucrania llevó a cabo numerosos ataques con drones contra la flota rusa. Temerosos de los drones, los buques rusos se retiraron en su mayoría a las bahías de Crimea. En total, Rusia perdió o sufrió daños en más de dos docenas de buques de guerra, lo que paralizó gravemente su capacidad de desembarco.
La Flota rusa del Mar Negro se mostró vulnerable a estos pequeños, maniobrables y relativamente baratos drones navales. Los misiles de largo alcance de los aliados de Ucrania debilitaron aún más la flota.
Asistencia aliada
El apoyo aliado fue crucial, especialmente la transferencia de misiles Storm Shadow de largo alcance y su homólogo francés, el SCALP. Estas armas permitieron a la Fuerza Aérea Ucraniana atacar a la flota rusa incluso cuando estaba atracada en los puertos. Ucrania consiguió incluso dañar un submarino valorado en más de 350 millones de dólares. En consecuencia, Rusia se vio obligada a retirar parte de su flota de la Crimea ocupada al puerto ruso de Novorossiysk.

Las armas aliadas permiten a Ucrania atacar las bases de la Flota del Mar Negro con ataques aéreos. Es importante destacar que Ucrania utiliza misiles Storm Shadow y SCALP exclusivamente contra objetivos militares en Crimea ocupada temporalmente, no en territorio ruso. Estos misiles se utilizan estratégicamente debido al limitado suministro de Ucrania. Cada operación se planifica cuidadosamente y tiene un gran éxito en la destrucción de objetivos, incluidas bases de la Flota del Mar Negro, centros de comunicaciones, sistemas de defensa antiaérea y buques de desembarco.
Parte 2: Desarrollo de la infraestructura de los puertos del Danubio y nuevas rutas
Ucrania no podía permitirse detener las exportaciones después de que Rusia se retirara del acuerdo sobre cereales en julio de 2023. Las exportaciones de cereales son vitales por dos razones: sostienen la mayor industria exportadora de Ucrania (que empleaba a más de 3 millones de personas en la agricultura antes de la guerra) y generan divisas esenciales. Aunque Ucrania agradece la ayuda de sus socios, debe cubrir de forma independiente sus gastos militares. Además, los puertos ucranianos gestionan el 70% de las importaciones y exportaciones del país.
Poner en marcha su propio corredor marítimo se convirtió en una necesidad. Ucrania aplicó dos estrategias de éxito:
Puertos del Danubio
Ucrania aumentó su dependencia de los puertos del Danubio tras la invasión a gran escala. Aunque geográficamente más al sur y con una logística más compleja, su proximidad a Rumanía (miembro de la OTAN) fue un salvavidas. Los puertos más grandes de Odesa y Kherson eran inaccesibles o estaban amenazados.

La estrategia funcionó. En 2022, los puertos del Danubio representaban el 12% de las exportaciones, porcentaje que aumentó al 29,2% un año más tarde. En 2023, una fuerte inversión de la agroindustria privada ucraniana financió 23 nuevas terminales en el Danubio. Para dar cabida a buques más grandes, se profundizaron los canales, se contrataron más prácticos y se operó 24 horas al día, 7 días a la semana, siempre que fue posible. El Danubio se convirtió temporalmente en la principal ruta de exportación de Ucrania.
Retorno de los Puertos de la Gran Odesa
Tras el cese del "corredor de cereales", Ucrania estableció su propio corredor marítimo independiente. Las rutas discurrían por aguas costeras ucranianas y zonas de 12 millas pertenecientes a Bulgaria, Rumanía y Turquía. Para tranquilizar a los armadores, Ucrania formó un fondo de seguros con las principales aseguradoras británicas.
En otoño de 2023, Ucrania exportó 8,6 millones de toneladas de mercancías. Aunque menos que el corredor de cereales, es importante destacar que 2 millones de toneladas eran no agrícolas. Esto reabrió exportaciones vitales para la industria metalúrgica ucraniana, que depende de un transporte marítimo rentable.
El éxito del corredor es evidente. En febrero de 2024 pasaron por él más de 8 millones de toneladas, con un potencial de crecimiento aún mayor, en comparación con los 1,4 millones de toneladas de septiembre de 2023, cuando se puso en marcha por primera vez.
¿Por qué es importante?
El corredor marítimo ucraniano es un ejemplo perfecto de cómo puede funcionar la asociación de Ucrania con socios occidentales. Las armas transferidas ayudaron a alejar a los buques rusos de las aguas costeras ucranianas, y los misiles de largo alcance, a intentar regresar. Y la colaboración con el gobierno rumano nos permitió aumentar rápidamente las exportaciones desde los puertos de la cuenca del Danubio y, en un momento dado, evitar que se detuvieran las exportaciones.
El aumento de las exportaciones permitió recuperar la capacidad de recibir ingresos en divisas y no dejar a millones de personas sin trabajo, y a decenas de millones - sin acceso a alimentos: una parte importante del grano ucraniano se exportaba a países africanos y a Oriente Medio.
En última instancia, al restablecer las exportaciones marítimasde mercancías, Ucrania ha reducido significativamente la presión sobre sus socios fronterizos terrestres. Ahora no se exportan desde Ucrania más de 300 mil toneladas de grano al mes por transporte ferroviario y por carretera, lo que permitirá aliviar la presión sobre las infraestructuras de los socios.