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- Guerra en Ucrania
¿Cree que Rusia bombardea Ucrania por venganza? Esto es lo que dicen los datos
Los medios de comunicación suelen considerar los ataques rusos de junio como una venganza por la Operación Telaraña, en la que Ucrania destruyó decenas de bombarderos estratégicos de Moscú. Pero esta afirmación no se sostiene con los datos: El Kremlin ordena ataques con misiles y aviones no tripulados contra ciudades ucranianas todos los días, y su escala aumenta constantemente.
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Illia Kabachynskyi]( "Photo of Illia Kabachynskyi")
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Rusia lanzó un bombardeo masivo sobre el territorio ucraniano el 6 de junio, golpeando no sólo las ciudades de primera línea y la capital, sino también regiones del oeste de Ucrania como Ternopil. Rusia disparó más de 452 drones, misiles balísticos y misiles de crucero. Fue uno de los ataques más intensos contra Ucrania desde que comenzó la invasión a gran escala.
Muchos periodistas occidentales la apodaron «la venganza del presidente Vladimir Putin por la Operación Telaraña», en la que las fuerzas ucranianas destruyeron un número significativo de bombarderos estratégicos rusos, una de las patas de la tríada nuclear del país y un símbolo clave de su poderío militar. Incluso funcionarios estadounidenses especularon con la posibilidad de que Rusia tomara represalias con un ataque de gran envergadura.
Lo cierto es que el ataque del 6 de junio fue masivo. Pero no era nuevo. Fue simplemente el último de un patrón sostenido de ataques rusos brutales y coordinados contra ciudades e infraestructuras críticas ucranianas. No por venganza, sino por máxima destrucción.
Cada ataque ruso es masivo
Consideremos los acontecimientos del 1 de junio de 2025.
La noticia de la Operación Telaraña empezó a circular por las redes sociales esa tarde, acompañada de imágenes y vídeos de aviones rusos en llamas en aeródromos militares. Al final del día, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) confirmó la operación y publicó imágenes de vídeo.
Pero unas 15 horas antes de que comenzara la Operación Telaraña, Rusia ya había llevado a cabo uno de sus bombardeos más devastadores de toda la guerra. En una sola noche, 479 armas aéreas -drones Shahed, otros vehículos aéreos no tripulados, misiles de crucero Kh-101 y misiles balísticos Iskander- fueron disparadas en toda Ucrania.
Para contextualizar: Rusia lanzó 447 Shaheds en todo 2022. Ahora, se había intensificado hasta el punto de disparar 479 armas aéreas en una sola noche, un nivel de intensidad inimaginable hace sólo unos años.
De hecho, los medios de comunicación rusos llevaban hablando desde mayo de un inminente ataque a gran escala bautizado como «Operación Relámpago de Zeus», un asalto combinado con drones y misiles destinado a mostrar toda la capacidad ofensiva de Rusia a Estados Unidos y Europa. Para prepararse, el Kremlin trasladó docenas de bombarderos Tu-22M3 y Tu-95MS a las bases aéreas de Olenya y Engels y desplegó allí ocho aviones de transporte Il-76 en sólo cuatro días, un movimiento muy poco habitual, indicativo de transferencias de municiones a gran escala.
El objetivo de Rusia no era atacar objetivos militares en Ucrania. En cambio, sus misiles apuntaban a instalaciones energéticas, infraestructuras y centros logísticos.
Una semana antes de las menciones públicas del Relámpago de Zeus, Rusia ya había empezado a ensayar ataques a gran escala. Entre el 23 y el 25 de mayo, las fuerzas rusas dispararon 995 armas aéreas -drones, misiles de crucero y misiles balísticos- con un promedio de más de 330 armas por noche.
Por esas mismas fechas, surgieron informes de que Rusia había aumentado significativamente la producción de drones Shahed-136, con el objetivo de alcanzar un nivel de ataque sostenido de al menos 500 unidades al día.
Desde principios de 2025, Rusia ha lanzado más de 17.800 drones Shahed. En los ocho primeros días de junio, esa cifra ascendió a 1.472 UAV. Durante los tres meses de primavera de 2025, hubo un solo día sin avistamientos de drones sobre Ucrania. En lo que va de junio, no ha habido ni un solo día sin un ataque. El invierno no fue diferente: los ataques se produjeron casi a diario.
La defensa ucraniana
Es esencial entenderlo: Los ataques de Ucrania no son actos de escalada, sino de defensa. Los bombarderos estratégicos rusos fueron atacados después de tres años de ataques diarios contra Ucrania, y en preparación de otra oleada de destrucción. Lo mismo se aplica a otros objetivos militares rusos.
Mientras se escribe este artículo, Rusia ataca de nuevo Ucrania con drones y misiles. Se han atacado infraestructuras civiles y edificios de oficinas en varias regiones.
Por el contrario, Ucrania atacó el Instituto Panruso de Investigación Científica en la ciudad de Cheboksary, una instalación dedicada a la producción de componentes para el ejército ruso. Ningún civil resultó herido, pero el resultado serán retrasos en las cadenas de suministro militar rusas.
Rusia no está tomando represalias. Está intentando destruirlo todo, independientemente de lo que hagan los demás.
-e27d4d52004c96227e0695fe084d81c6.jpg "Qué se siente cuando un dron FPV ruso ataca a un periodista (y ese periodista eres tú)")