El ATACMS alcanza un depósito de municiones en Rusia. Así es como el alcance de los misiles estadounidenses está reconfigurando la defensa de Ucrania

Antes del amanecer del 19 de noviembre, las explosiones iluminaron el cielo nocturno en la región rusa de Briansk, destrozando un depósito de municiones del 1046º Centro de Material y Apoyo Técnico. A pesar de las afirmaciones de Rusia de que los misiles habían sido interceptados, las repetidas detonaciones contaban una historia diferente. Ucrania desplegó con éxito misiles ATACMS suministrados por Estados Unidos(CNN/ Reuters).

A partir de mediados de noviembre de 2024, Ucrania tiene autorización para atacar emplazamientos militares en territorio ruso con misiles estadounidenses ATACMS, que tienen un impresionante alcance de 300 kilómetros, lo que le permite golpear profundamente en territorio ruso desde el borde de su frontera.

El depósito de municiones, situado cerca de la ciudad rusa de Karachev, a unos 175 kilómetros de la ciudad ucraniana de Hlukhiv, en la región de Sumy, se encuentra dentro del radio de acción del ATACMS. Fiel a su costumbre, Ucrania atacó un emplazamiento militar, destruyendo con éxito un depósito de armas. El mismo día, Rusia lanzó un ataque contra Hlukhiv, matando e hiriendo a varios civiles.

Ataques de ATACMS

El sistema ATACMS representa una adición vital al arsenal ucraniano. Su alcance sitúa a decenas de aeródromos rusos y a más de 200 objetivos militares a una distancia de impacto. El grupo de expertos estadounidense Institute for the Study of War (ISW) identificó225 emplazamientos críticos.

Aunque los misiles ATACMS no decidirán por sí solos el resultado de la guerra, proporcionan a Ucrania la capacidad de atacar puestos de mando rusos, grandes concentraciones de tropas y, lo que es más importante, depósitos de armas. Estos depósitos, situados más cerca de las líneas del frente para agilizar los esfuerzos de reabastecimiento, son vitales para sostener a las fuerzas rusas, y objetivos principales para su destrucción.

Los ATACMS pueden apuntar a equipos rusos de gran valor, como los sistemas de defensa antiaérea S-300 y S-400. La eliminación de estas defensas podría allanar el camino para los ataques de largo alcance de Ucrania contra objetivos militares situados más al interior de Rusia o mejorar la seguridad de las aeronaves ucranianas que operan cerca de las líneas del frente. La posible amenaza a las bases aéreas rusas podría obligar a sus aeronaves a trasladarse más lejos del campo de batalla, reduciendo la flexibilidad y la eficacia operativa.

Storm Shadow y SCALP

La decisión estadounidense también podría influir en aliados como el Reino Unido y Francia para que autoricen el uso de sus misiles Storm Shadow y SCALP contra objetivos rusos. Estos misiles, con un alcance de hasta 500 kilómetros, podrían alcanzar varios grandes depósitos de municiones rusos actualmente fuera del alcance de los ATACMS.

Ucrania ya tiene un historial probado con estos sistemas: ataques anteriores con Storm Shadow y SCALP neutralizaron parcialmente la Flota del Mar Negro rusa y otros activos militares estratégicos.

La cantidad, clave

Ucrania necesita un flujo constante de ATACMS para seguir atacando objetivos críticos de Rusia, como aeródromos y enormes depósitos de municiones. Dado que Estados Unidos posee más de 2.000 de estos misiles -la mitad a punto de ser desmantelados-, su envío a Ucrania podría potenciar su defensa y desmantelar la maquinaria bélica rusa.