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Trump, Putin y Zelensky intensifican la diplomacia de alto riesgo en torno a las negociaciones para el alto el fuego. Esto es lo que sabemos
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está intensificando la presión sobre Moscú para que acepte un alto el fuego en Ucrania, con conversaciones directas ya mantenidas entre su enviado y Vladimir Putin, y consultas en curso con el presidente Zelenskyy y los aliados europeos. A medida que se acerca la fecha límite autoimpuesta, la perspectiva de una cumbre entre Trump y Putin suscita esperanzas —e incertidumbre— sobre un posible fin negociado de la guerra.
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![Photo of Jamal Marcelin]( "Photo of Jamal Marcelin")
![Photo of Dariia Mykhailenko]( "Photo of Dariia Mykhailenko")
En los últimos días se ha producido una intensa actividad diplomática en la que han participado el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, el líder ruso Vladimir Putin y el presidente estadounidense Donald Trump, a medida que se intensifican los esfuerzos para lograr un alto el fuego en Ucrania antes de la fecha límite autoimpuesta por Trump para el 8 de agosto.
El 6 de agosto, el presidente Zelenskyy confirmó que había hablado con el presidente Trump tras la visita a Moscú del enviado personal de Trump, Stephen Witkoff. La llamada tuvo lugar durante el regreso de Zelenskyy de una visita al frente en la región ucraniana de Sumy.
«Esta conversación se produjo tras la visita del representante del presidente Trump, Stephen Witkoff, a Moscú», dijo Zelenskyy en un comunicado oficial publicado en su canal de Telegram.
Zelenskyy enfatizó que la posición de Ucrania, apoyada por sus socios occidentales, sigue siendo la misma: «La guerra debe terminar. Y debe terminar de forma honesta».
«Ucrania defenderá sin duda su independencia», afirmó Zelenskyy. «Todos necesitamos una paz duradera y fiable. Rusia debe poner fin a la guerra que ha iniciado».
Ese mismo día, el Kremlin confirmó que la reunión entre Putin y Witkoff había tenido lugar en Moscú, pocos días antes de la fecha límite fijada por Trump. Según Reuters, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, describió la reunión como «muy útil, detallada y sincera», aunque se negó a dar más detalles. Afirmó que se habían tratado temas relacionados con la economía mundial y los mercados energéticos, pero no especificó si se había abordado directamente la guerra en Ucrania.
Witkoff, promotor inmobiliario y confidente de Trump desde hace mucho tiempo, viajó a Moscú como emisario personal y no como funcionario oficial de Estados Unidos. Los medios de comunicación rusos calificaron la visita como una señal significativa en medio de lo que parece ser un esfuerzo coordinado de Trump para lograr un fin negociado de la guerra. Trump ha advertido de «sanciones secundarias y aranceles generalizados» a los principales compradores de petróleo de Rusia —China, India y Brasil— si Moscú no se compromete a la paz antes del 8 de agosto.
«Si Rusia no se sienta a la mesa, seguiremos adelante con las sanciones contra sus principales compradores de energía», declaró Trump en una entrevista con Bloomberg.
Según The New York Times, Trump se está preparando para reunirse con Putin en persona la próxima semana. La cumbre tendría como objetivo ultimar los términos del alto el fuego, siempre y cuando Moscú esté dispuesta a participar.
«Si Putin se niega, recurriremos a las sanciones», habría dicho Trump a sus asesores.
El Times señaló que Trump ya ha comunicado sus planes a Zelenskyy y a varios líderes europeos. Aunque la Casa Blanca aún no ha confirmado la fecha ni el lugar, según se informa, los preparativos internos ya están en marcha.
Al mismo tiempo, Zelenskyy declaró que Kyiv y Berlín habían alineado sus posiciones y que se estaban preparando nuevas conversaciones.
«Ucrania no teme las reuniones y espera el mismo enfoque valiente por parte de Rusia. Es hora de que pongamos fin a la guerra», escribió.
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El 7 de agosto, Bloomberg informó que Trump, durante una llamada informal con líderes aliados —a la que también asistió Zelenskyy— insinuó que Putin podría estar abierto a conversaciones de paz si se incluía en la agenda la cuestión de las concesiones territoriales.
El propio Putin abordó la posibilidad de reunirse con Zelenskyy, pero afirmó que aún no se han dado las condiciones necesarias para tal diálogo.
«He dicho muchas veces que, en principio, no tengo nada en contra, es posible. Pero para ello deben darse ciertas condiciones. Lamentablemente, aún estamos lejos de crear esas condiciones», declaró a los periodistas tras una reunión en Moscú con el presidente de los Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed Al Nahyan.
En declaraciones a los periodistas, Putin afirmó que tanto Estados Unidos como Rusia habían expresado su interés en celebrar la reunión, sugiriendo a los Emiratos Árabes Unidos como posible anfitrión, según informó Interfax el 7 de agosto.
«Tenemos muchos amigos dispuestos a ayudarnos a organizar un evento de este tipo. Uno de esos amigos es el presidente (jeque Mohamed bin Zayed Al Nahyan) de los Emiratos Árabes Unidos», declaró Putin durante una comparecencia conjunta con el líder emiratí, que se encuentra actualmente de visita oficial en Moscú.
A medida que se acerca la fecha límite del 8 de agosto, todas las miradas siguen puestas en si Moscú responderá al ultimátum de Trump o si nuevas rondas diplomáticas cambiarán el curso de la guerra.
